Como te podrás imaginar, a mi, que se sienta agredida por las risas de Camps y de Barberá, es cosa que me la trae floja.
Y no haría más caso del tema si no fuera porque la tengo enfilada hace tiempo. Y es que la condesa heredera de Montseny será muy chuli, muy progre, y todo lo que quieras, pero la noto un tanto parcial ya que no se siente agredida por la genuina Sonrisa del Reino, la del Rodríguez. Que es la sonrisa que nos está jodiend* a todos.
Y como dice lo que quiere (está en su derecho), pero calla lo que quiere, la voy a recordar un par de cosillas que explicarán el por qué la tengo enfilada:
Porque fue una de las personas que se hizo eco, con su habitual agresividad, de la famosa silla de ruedas en una manifa de la AVT (tengo que reconocer que posteriormente se disculpó, pero siendo periodista debería haberse informado primero antes de "largar")
Y por otro episodio poco conocido (solo se lo he leído a Jesús Cacho, que lo cita de pasada en un libro sobre la familia Botín), que define muy bien al personaje:
En sus tiempos de entrevistadora incisiva, se anunció en TVE una entrevista a Emilio Botín (padre) que hasta la fecha no había concedido jamás ninguna. Conociendo su carácter, y conociendo el de Emilio, la cosa auguraba la muerte de uno de los contendientes.
¡Pues nada, que la entrevistadora casi pierde las bragas de la emoción!Y ahora te explico la trastienda:
- Por aquellas fechas la moza andaba encamada con el productor José Sámano.
- José Samano era hijo de "Pepín" Sámano, empleado del Banco de Santander* y responsable del Bolsín** de Bilbao, que a la sazón estaba bajo control de Botín.
- Pepín, su retoño, y el apaño, fueron invitados*** a pasar unos días en la finca de la familia Botín.
- Algunos halagos, algunos "avisos", y....¡fin de la historia!.
¿Entiendes ahora que no me guste el personaje y no la pase ni una? Pues aclarado.
* En aquellos tiempos el banco era de Santander, su color corporativo era el verde (color mucho más suave y amable que el actual), y sus empleados no llegarían a 4.000 en toda España y se conocían casi todos.
** Lugar donde se compran y venden valores de comercio público y privado que no llega a la categoría de bolsa.*** Todo un privilegio y cosa poco frecuente. A mi, ni el padre ni el hijo, me han invitado nunca a pesar que nos conocemos. De vista, pero nos conocemos.
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