jueves, 30 de julio de 2009

Algún día el Estado de Derecho llegará

Tengo que discrepar de todos aquellos que dicen que España es una porquería y que no merece la pena vivir aquí.
Es un país tan estupendo que vas al médico y después de pasar consulta y hacerte análisis, radiografías, y lo que haga falta, te dice que vuelvas a por los resultados dentro de tres años.
Más o menos, que la cosa tampoco es como para tomársela con prisas y cometer alguna pifia.
Por otra parte somos el único país que tenemos terroristas como cargos públicos y donde, salvo que seas de la oposición (donde puedes tener un serio follón si no conservas los comprobantes de las chuches de los nenes), todo te es archivado.
Te denuncie una Asociación de Internautas, te denuncie un Sindicato No Gubernamental.
Eso si, más te vale no preguntar mucho no vaya a ser que te censuren.
Y si no te gusta, ya sabes. Tienes dos opciones: O te marchas, o te marchas.

Se le fundieron los plomos
al estado de derecho,
el ciudadano ya sabe
que el estado es de cohecho
y aunque el gobierno lo niegue,
-como el daño ya está hecho-,
nos seguirán dando teta
igual que a niños de pecho.

Los sindicalistas todos,
-qué saben como el diablo
más que por sabios por viejos-,
esperan en sus cubiles
que zAPAtero les lleve
nuevas remesas de euros
pues de acabarse el trasvase
se la habrá de ver con ellos.

Bombillas traigan ideas
para alumbrar los cerebros:
…esos de bajo consumo
tan propios del desgobierno
pues si se apagan las luces
el apagón será eterno;
claro que si se iluminan
tal como vienen haciendo,
mejor es que las bombillas
exploten antes de tiempo
para cambiarlas por otras
que alumbren más y nos guíen,
-como al rebaño el cencerro-,
para salir cuanto antes
de este triste atolladero.

Todas las poesías, actualizadas y ordenadas por antigüedad, con enlaces a las entradas originales para situar en su contexto correspondiente.

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