lunes, 30 de agosto de 2010

El Ministerio de Exteriores, sí

Los mis pobres activistas se han creído que todo el mundo es orégano y que se pueden manifestar como si tal cosa.
Pues no señor. Eres marroquí, y te manifiestas en Melilla contra España, y el Menestro de Interior (de España) pierde el culo en pedir disculpas al instigador de las manifas.

Pero eres español, y te manifiestas en el Sahara, y los marroquíes te muelen a palos.

Y si antes el Ministerio de Exteriores te dejaba abandonado, ahora -y para no molestar al moro- primero lo niega y después lo justifica.
Dos asuntos que someto a la consideración de los activistas:
  • ¿Se han creído que la cosa de Exteriores de España es igual que el Departamento de Estado USA, que protege a sus ciudadanos en cualquier parte del mundo?
  • ¿Que coño pintan en el Sahara? ¿No hay aquí asuntos importantes por los que protestar? ¿No tienen familia a la que dedicar su cariño y su tiempo?
El mundo es muy injusto, no voy a negarlo, pero me parece que a algunos lo que les va es la marcha.
Y mucho cuidadín con el Sahara, asunto que sirve de moneda de cambio para muchos chanchullos de políticos, no vaya a ser que algún paria de la famélica legión no se pueda instalar en Marruecos.

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