La primera de ellas es como diablos unas personas normales, padres de familia, cristianas, leídas y escribidas, cuando se hicieron nazis, se pudieron convertir en animales.
La segunda es como demonios podemos lamentar que se hunda un partido golpista, instigador de una guerra civil, plagado de ladrones y navajeros, que practica el crimen de Estado, en vez de lamentar que no triunfen partidos decentes (VOX, por ejemplo) o que aumente la extremaizquierda.
¿Que se hunde la P$O€? ¡Que pena me da! (ya iba siendo hora).
Y de la Justicia, de la que vengo hablando hace días, mejor no decir nada:
- Se piden tres años de prisión para una mujer que se llevo en la boca la falagde de un dedo de la mano de una contraria durante una pelea
- Al empresario de la macrofiesta del Madrid Arena, por cinco muertes, cuatro años.
1 comentario:
Es que no ha cristo que lo entienda amigo mio, lo que no entiendo tampoco es cuando esto se empezo a pudrir, hasta llegar a este grado de descomposicion total.
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