martes, 22 de febrero de 2011

Valiente sinvergüenza

La feminazi de la famélica legión se tiene que ir de un restaurante de lujo, donde la llaman jeta y comiona.
Empecemos a tomar ejemplo.
Y no digo más para evitar calentarme, no sea que se me escape y la llame cualquier cosa desagradable a esta tonta de los cojon*s.

PS.- La aconsejo que no intente replicar cada vez que se la increpe: Esta vez casi se esmorra y se queda sin sus morritos, pero en otra ocasión parecida se descubrió que iba "algo achispada"


Para mantener el tipo
hay que comer muy poquito
y para no dar que hablar
lo mejor es no abusar,

no abusar de las prebendas,
al menos hasta que aprendas
que por respeto a tu cargo
es bueno pasar de largo

y no dejarse tentar
por los tetos de mamar
que si no la oposición
puede colarte un marrón

aunque de ti nadie espera
que cierres la cremallera
que dio pie a que tu familia
se reparta la tortilla

igual que los botellones
de Benidorm, por cojones.

No hay comentarios: